domingo, 6 de julio de 2014

Challenge 4: Collection. Prototipo de Scape from Area 51. Tercera prueba

Tras la tercera prueba, Area 51 ha ganado jugabilidad aunque sigue sin tener "brillo". Lo probamos con tres jugadores y no funcionó del todo mal. Sigue siendo algo largo por lo que no teminamos la partida hasta el final. Mover 1D6 los PNJs hacía el juego algo lento (lo hemos pasado a 1D6/2) y al tablero le falta estructura de modo que si no se sigue un orden determinado para capturar los objetos es difícil terminar el juego así que hemos optado por hacer una modificación del tablero para abordar la cuarta prueba.
PNJs a la captura del alien
Tablero de la tercera prueba en juego
Hay opciones que no se usan, como el teletransporte y el control mental, pero sí la congelación. Posiblemente el teletransporte solo tiene sentido al final de la partida, como las fichas de control mental, aunque lo veremos en la próxima prueba en la que intentaremos llegar al final.
Tablero de la 3ª prueba. Hemos juntado algo más los elementos
En cuanto a lecciones aprendidas, aunque creo que he empleado demasiado tiempo en la parte estética, he generado una base de datos de elementos gráficos que puedo emplear en futuros juegos de modo que la inversión reducirá el esfuerzo en siguientes trabajos.

También he aprendido que diseñar un tablero es bastante complejo, por lo que es mejor hacer pruebas de concepto e ir cambiando el tablero a medida que se prueba.

El tener tres tipos de acciones (teletransporte, paralizador y control mental) desde el principio me pareció interesante, aunque creo que complicó las reglas sin necesidad. Es posible que alguna de estas opciones deba desaparecer.

Con la cuarta prueba creo que podemos darlo por terminado y pasar a otro ejercicio donde aplicar lo que hemos ido aprendiendo.


jueves, 3 de julio de 2014

KSP. La cosecha de puntos. Parte III (y final).

El objetivo de poner un laboratorio en órbita era visitar los diferentes biomas de Mün, hacer los experimentos con el módulo lander y volver al laboratorio a depositarlos allí.
Cuando haces un experimento, con el Mystery Goo por ejemplo, el resultado queda almacenado en el dispositivo. Si haces un EVA con un kerbal y te acercas al dispositivo puedes tomar los datos y transportarlos al command pod de tu nave, del mismo modo que lo haces con las recogidas de muestras del suelo. Pero en el command pod sólo se puede alacenar un experimento de cada clase del mismo bioma.
El laboratorio es diferente. Cuando tomas los datos, puedes llevarlos al laboratorio y almacenar un número ilimitado en él. Por eso, cada vez que el lander sube cargado de datos al laboratorio, el kerbonauta hace un EVA, los toma todos y se los lleva para almacenarlos o ser procesados.
El procesamiento de datos te da un bonus en el caso que quieras transmitirlos a Kerbin por radio en lugar de llevarlos en la nave. El problema es que se pierden puntos en el proceso. Sólo interesa transmitir los datos que llegan con una eficiencia del 100%, como por ejemplo los crew reports o los EVA reports.
En mi caso, cuando tuve 18 experimentos almacenados decidí traer el laboratorio a casa para cosechar los puntos tan duramente recolectados.

Regreso a Kerbin

El regreso se puede hacer con muy poco combustible si haces una trayectoria como la de la foto.


Cuando alcanzas la velocidad de escape de Mün, te captura el planeta y caes hacia él. Corrigiendo un poco la trayectoria puedes entrar a la atmósfera directamente. En este caso ha habido suerte y caemos al mar llevando la preciada carga de experimentos.

La cosecha

Todos los esfuerzos han valido la pena… En un solo viaje ganamos 655 puntos de ciencia.


Con esto tenemos suficiente para conseguir de golpe dos de las tecnologías que me hacen falta para progresar: los motores nucleares y la electrónica.


Y con esto finalizamos con éxito el objetivo propuesto.

martes, 1 de julio de 2014

KSP. Nos quedamos sin combustible. Parte II.

Ya tenemos un laboratorio y un lander orbitando Mün… ¡Bajemos a por los puntos de ciencia! El alunizaje en las midlands es relativamente sencillo, allí podemos salir de la nave, explorar y recoger muestras.

Tras hacer nuestras cositas debemos volver al laboratorio para procesar las muestras, almacenarlas en él y repostar combustible. Para ello nos ponemos en órbita de nuevo y empezamos las maniobras de acoplamiento.

El acoplamiento (docking)

La idea es unir las dos naves de forma suave (lo contrario sería un choque, y a Jebediah no le gustaría). Esta maniobra no es trivial. Básicamente consiste en igualar los planos orbitales de las naves, igualar los perigeos de las órbitas y después los apogeos, dejando el nuestro un poco más cercano al cuerpo celeste que estamos orbitando. De este modo, en cada revolución, las naves se irán acercando la una a la otra. Cuando estemos suficientemente cerca podemos acelerar hacia el laboratorio para encontrarnos con él. La metodología no es complicada, pero requiere práctica. Es importante ser capaz de acelerar progrado o contra-grado de nuestra trayectoria a la vez que nos dirigimos hacia el laboratorio. En esta imagen estamos frenando (acelerando contra-grado) para reducir la velocidad relativa respecto del laboratorio.

En esta otra estamos muy cerca, nos movemos progrado pero no aceleramos con los motores principales sino con el sistema RCS, que nos permite una mayor precisión.

Tras el acoplamiento, recolectamos los experimentos con un kerbin mediante una actividad extravehicular (EVA) yendo de instrumento en instrumento y utilizando el sistema de escaleras. Después los llevamos al laboratorio donde los podemos procesar.

Finalmente repostamos y podemos bajar otra vez a la superficie de la luna.

Repostaje

Después de bajar un par de veces, descubrimos horrorizados que queda poco fuel. Es la hora de emplear la lechera, esa nave de nombre tan descriptivo que diseñamos en su momento. Tras lanzarla hacia Mün comenzamos las maniobras de acoplamiento.


Un acoplamiento perfecto que permite transferir todo el combustible al laboratorio orbital.

Vuelta a empezar

De nuevo al tajo. Con fuel recién traído de Kerbin iniciamos de nuevo los viajes a la superficie. Esta imagen es de los highlands de Mün.

La recolección de puntos va a buen ritmo y es hora de pensar en volver a casa.